miércoles, 13 de agosto de 2008

El Atlético Torcal, un equipo de barrio en la élite nacional

13/08/2008. El conjunto malagueño, entrenado por Daniel Cortés, arranca este año en la segunda categoría del fútbol sala femenino con el objetivo de conseguir la permanencia, aunque siempre sin renunciar a nada


Hace diez años comenzó una aventura: unas pocas chicas y otros tantos técnicos formaban un pequeño equipo femenino de fútbol sala. Pasada la década, ese conjunto se estrena ahora en División de Plata, la antesala de la máxima categoría. Mucho sacrificio y trabajo hay detrás de este logro, que ha convertido al Atlético Torcal en el primer bloque femenino malagueño en ascender a esta nueva división. El entrenador, Daniel Cortés, recuerda los inicios del Torcal, "cuando la gente llenaba la banda porque era algo totalmente nuevo, ver a unas niñas jugar y hacerlo bien". Ahora todo es muy distinto, es un club en la élite que peleará a nivel nacional contra otros 12 equipos por el ansiado sueño: la División de Honor.
El reto se antoja enorme. Más si tenemos en cuenta que la de Plata es una categoría recién nacida, creada con la intención de suavizar el cambio tan brusco de pasar de la liga regional a la nacional. Ahora, un club modesto como el Torcal viajará por las pistas de Andalucía, Murcia, Valencia y Castilla La Mancha para conseguir la permanencia, objetivo en el que coinciden Cortés y Laura Barrera, la capitana del equipo. Barrera comenta que hay que ir a cada partido "como si fuera el último", aunque no descarta pelear "por los puestos altos de la tabla". La capitana, la más veterana, afronta el desafío con ganas de aprender y "rendir al máximo cada jornada para poder estar siempre ahí".
No obstante, no todo ha sido un camino de rosas para el Atlético Torcal. Ser un deporte minoritario todavía sigue siendo un gran obstáculo. "Tenemos poca repercusión y con ello las ayudas son menores", asegura Cortés. El día a día es llevadero gracias a la ilusión de las jugadoras, según Barrera, porque "las facilidades son menores, pero tiramos hacia adelante con nuestra ilusión". A esto hay que añadir los tiempos de crisis en los que vivimos, que dificultan más aún la existencia de clubes deportivos por la falta de patrocinadores. Aunque en ese aspecto el técnico se muestra satisfecho por el apoyo recibido año tras año: entidades como Cajamar, Fundación Deportiva, Josemi Sports, Cafrán Cocinas, Junta de Distrito de Carretera de Cádiz y otros comercios de la zona colaboran en la medida de lo posible con el Torcal y favorecen la buena marcha de las féminas.
Sin embargo, todavía hay mucho trabajo que hacer para eliminar las diferencias en el deporte en general. Cortés reclama "más atención al fútbol sala", sobre todo teniendo en cuenta los éxitos del UMA Antequera y el ascenso de otro cuadro femenino a Plata, como el Campillos. Para el técnico no deberían haber desigualdades, sino reconocer "el trabajo de las chicas". Por su parte, Barrera desea que todos valoren "el gran esfuerzo que hacemos cada una, dejando de lado trabajos, estudios o parejas". Además, cree en la igualdad con el hombre, ya que, obviando el aspecto físico, "algunas superan a muchos jugadores técnica y tácticamente", garantiza la capitana.
Todo esto por el fútbol sala, en el que no ganan dinero, en el que sólo luchan por ser mejores y disfrutar. "El día que nos quitemos el parche de los ojos podremos ver un gran deporte y apasionado como es este", sentencia Cortés.

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